All-Star NBA. Las Estrellas Suplentes (1 de 2)

Ya queda menos para llegar al fin de semana del 13 y 15 de Febrero. Fin de semana de la fiesta del baloncesto en la NBA y por ende para muchos de los seguidores de esta liga en todo el mundo. Esta edición, que será la número 64, tendrá el aliciente, sobre todo para el aficionado español, de ver sobre la cancha como titulares a los hermanos Gasol en el “Partido de las Estrellas” (Este contra Oeste). Además otro aliciente, no menos interesante, será el de ver al “españolizado” Nikola Mirotic (nacido en Podgorica – Montenegro), en el partido de los “rookies” frente a los “sohomores” (jugadores novatos frente a jugadores que participan en su segunda temporada como jugadores de la liga americana. Un partido en el que por primera vez tanto rookies como sophomores se dividirán por nacionalidades por primera vez en este magno evento, en lo que supone una especie de afrenta bastante edulcorada de lo que podría ser una representación de un EE.UU frente al “Resto del Mundo” en el Madison Square Garden de Nueva York como escenario.

Esta gran aventura del All-Star que se inició en 1951 como una idea del publicista Haskell Cohen y apoyada por el fundador de los Boston Celtics, Walter Brown, con el mítico Boston Garden como primer “teatro”, ha encumbrado a una notable cantidad de jugadores desde entonces. A lo largo de la historia de los partidos del All-Star han sido muchas las leyendas que se han alzado con el trofeo de MVP (Most Valuable Player) o jugador más valioso y en varias ocasiones un mismo jugador se ha hecho con él en más de una ocasión. Desde el primer jugador en recibir el premio como mejor jugador, Easy Ed Macauley integrante del equipo del “Este” con 20 puntos en 1951 podríamos citar a otros grandes jugadores que también lo hicieron como Bob Cousy de los Boston Celtics en las ediciones de 1954 y 1957, Wilt Chamberlain en 1960 cuando aún era integrante de los Philadelphia 76ers, el gran Oscar Robertson de los Cincinnati Royals en tres ocasiones (1961, 1964 y 1969), Julius Erving (1977 y 1983), Larry Bird (1982), Magic Jonson (1990 y 1992), Michael Jordan (1988, 1996 y 1998) , Kobe Bryant (2002, 2007, 2009 y 2011) y Shaquille O´Neal (2000, 2004 y 2009) por citar algunos.

La gran mayoría de los jugadores anteriormente citados se hicieron con el premio de MVP habiendo sido seleccionados para jugar el All-Star como integrantes de alguno de los quintetos titulares. Sin embargo a lo largo de la historia del All-Star han habido hasta 11 ediciones en las que el MVP se lo ha llevado un integrante del banquillo y no un titular. La primera vez que un jugador de banquillo se hacía con el MVP en el All-Star ocurría el 18 de Enero de 1955 en Nueva York cuando Bill Sharman, jugador de los Boston Celtics, seleccionado por Washington Capitols de la 2ª ronda en el Draft de la NBA del año 1950, lo conseguía tras anotar 15 puntos y coger 4 rebotes en tan sólo 18 minutos de juego ayudando al Este a vencer por 100-91. Esta edición estuvo marcada por la exhibición de dos jugadores de Boston Celtics. Bob Cousy que fue el máximo anotador con 20 puntos, pero Bill Sharman fue elegido MVP gracias a sus 10 puntos en el ultimo cuarto. Un Bill Sharman que tuvo el mejor porcentaje de tiros libres hasta en siete ocasiones (1953, 1954, 1955, 1956, 1957, 1959 y 1961).

El siguiente jugador suplente en conseguir ser MVP del All-Star fue Bob Pettit que lo haría al año siguiente de Bill Sharman, en 1956. Ésa fue la sexta edición celebrada en Rochester el 24 de Enero de 1956 y en aquella ocasión Bob Pettit contribuyó a la victoria del Oeste sobre el Este por 108-94 con 20 puntos y 24 rebotes en 31 minutos, lo que hasta la fecha supone el record reboteador de un jugador del All-Star de la NBA partiendo desde el banquillo.

Diez años después, en 1966 sería Adrian Smith quien lograra el título de MVP partiendo como suplente tras registrar una estadística espectacular con 24 puntos y 8 rebotes, en 26 minutos, en el Cincinnati Gardens de Cincinnati el 11 de Enero de 1966 en la edición número 16. El Este arrasaba al Oeste por 137-94 y Adrian Smith, que pasa por ser uno de los MVPs menos conocidos de la historia, tras alcanzar el galardón en su única aparición en este evento a lo largo de su carrera. Adrian Smith se impuso a jugadores de la talla de Wilt Chamberlain y Oscar Robertson que se quedó a tan sólo 2 asistencias para hacer un triple doble (17 puntos, 10 rebotes y 8 asistencias).

Dos años después en 1968 Hal Greer de los Philadelphia 76ers se hacía con el galardón merced a los 19 puntos anotados en el tercer cuarto de sus 21 totales. Este record de anotación en un cuarto del All-Star le valió ser elegido como MVP. La victoria fue total para el combinado del Este por 144-124 sobre el Oeste y junto a Greer brillaron John Havlicek de los Boston Celtics (26 puntos) y de nuevo Oscar Robertson de Cincinnaty (18 puntos y 5 asistencias). En el Oeste tan sólo el trío de Los Ángeles Lakers ofreció algo de resistencia con Elgin Baylor (22 puntos y 6 rebotes), Jerry West (17 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias) y Archie Clark (17 puntos).

El quinto jugador en ser MVP del All-Star saliendo del banquillo fue Lenny Wilkens de los Seattle Supersonics en la edición de 1971 celebrada en San Diego, una de las más reñidas y disputadas con un marcador de 108-107 para el Oeste. Wilkens anotó 21 puntos en 20 minutos con una serie de 8 de 11 en tiros de campo y 5 de 5 en tiros libres. La peculiaridad en este caso es que Wilkens en ese momento era entrenador-jugador del equipo.